Descripción de la Publicación académica:
En Colombia, el sector educativo fue uno de los más golpeados con la pandemia. Con el cierre de los establecimientos educativos del sector oficial decretado desde el mes de marzo de 2020 y que se prolongó hasta finales del año (a excepción de una cantidad reducida de colegios y universidades que iniciaron sus actividades académicas ese mismo año, a manera de pilotaje, una vez fueron aprobados sus protocolos de bioseguridad), miles de estudiantes se vieron afectados, especialmente en las zonas rurales, donde la educación virtual no era viable. Muchos de ellos se vieron forzados a dejar la escuela, lo que constituyó una de las grandes preocupaciones para Educapaz, puesto que, en muchos casos, este alto en el camino significa una interrupción definitiva en la trayectoria educativa. Además del ausentismo y la deserción, crecía la incertidumbre respecto a las pérdidas en términos de aprendizaje que agravarían las disparidades urbano-rurales, y las afectaciones a la salud mental de las niñas, niños y jóvenes. Este panorama animó al Programa Nacional de Educación para la Paz (Educapaz) a la realización de un estudio exploratorio con el objetivo de identificar las principales lecciones que nos ha dejado la pandemia y cuáles son los principales desafíos para la continuación y el mejoramiento de la educación en la ruralidad, tomando como referencia los territorios acompañados por el Programa. Esta indagación sirvió como pretexto para convocar conversaciones con los miembros de las comunidades educativas y autoridades, y escuchar de su propia voz sus reflexiones, experiencias y sentires respecto al primer año de pandemia. Este informe presenta los resultados del estudio exploratorio realizado por el Programa en el año 2021, el cual incluyó la aplicación de dos encuestas a rectores y docentes de sedes educativas con las que trabaja Educapaz y la realización de veintitrés encuentros de reflexión con diversos actores (estudiantes, familias o cuidadores, docentes, directivos docentes y autoridades educativas) de los territorios de Cali, Ibagué, Chocó, Cauca, Córdoba y sur del Tolima. En primer lugar, el informe presenta un breve recuento del contexto de la educación en 2020, enfatizando en las consecuencias del cierre de los centros educativos en el mundo, en las respuestas que se formularon desde Colombia ante esta situación y en cuáles fueron los principales desafíos para llevar a cabo la educación no presencial, especialmente en la ruralidad. El segundo apartado expone las principales afectaciones y los aprendizajes que trajo la pandemia para educar en la ruralidad, tomando como fuente la información recogida con las comunidades educativas de los territorios acompañados por Educapaz. El apartado final contiene un epílogo que aborda la reflexión sobre los retos para el regreso a la presencialidad y el futuro de la educación rural en Colombia, y las conclusiones.